El conjunto que dirige Miguel Rivera ocupa la séptima plaza con 20 puntos, a tan solo tres del play off de ascenso y ocho por encima de la zona roja de la tabla clasificatoria.
La trayectoria del club astigitano ha ido claramente en sentido ascendente, hasta tal punto que en sus últimos cinco encuentros obtuvo cuatro victorias y un empate. Por si fuera poco, el Écija es el cuarto conjunto más anotador del grupo con 20 tantos, y el cuarto menos goleado con 12 chicharros encajados.
Miguel Rivera
Rivera es un técnico consagrado, con un amplio bagaje en el fútbol español dirigiendo clubes
importantes como Linares, Málaga B, Melilla, Granada 74 y Leganés, entre
otros. El míster malagueño cumple su segunda temporada al mando de la nave azulina. Recordemos que la pasada campaña salvó al equipo de un descenso casi seguro, completando un último tercio de campeonato brillante.
Plantilla
Nos encontramos ante un plantel modesto, formado por jugadores de perfil medio para cumplir con el objetivo primodial de no pasar apuros, tal como no consiguiese el año pasado, pero sin renunciar a ocupar puestos nobles, tal y como está sucediendo. Rivera ya ha demostrado, en cada conjunto que ha dirigido, capacidad para sacar fruto de dónde apenas lo hay, objetiendo en 200 % de los jugadores que posee. Por eso, creo que este Écija Balompié es uno de los candidatos a ser el equipo revelación de este curso deportivo.
Para esta campaña, Rivera ha mantenido en nómina a once jugadores de la temporada pasada como son el meta Ramón; los defensas Óscar, Alejo y Antoñito; y los centrocampistas Coco, Migue, Nando, Abel Segura y Lolo Armario.
Junto a ellos, han retornado al club Pizarraya (Puertollano) y Plata (RSD Alcalá), además de los defensas Astraín (Córdoba B), Blanco (Ceuta) y Juanje (Roquetas); los centrocampistas Rubén Cruz (Melilla), Villa (Écija B) y Javi (Écija B); y los delanteros Juanfri (Atlético Malagueño) y Juan Delgado (Séneca).
Síntesis por línea
Habitualmente, dispone sobre el terreno de juego el clásico 1-4-2-3-1, con dos laterales que se incorporan frecuentemente a labores ofensivas, un doble mediocentro (uno de carácter defensivo y otro ofensivo), dos alas bien abiertas para dar amplitud, un enganche y un delantero referencia. Los de Ramón Banco deben prestar especial atención en el potecial aéreo ofensivo del equipo astigitano, en el que los centrales Óscar y Astraín ven puerta con relativa frecuencia. Por contra, resultan tan vulnerables en esa faceta del juego en su propia área como fuertes en la ajena.
El ex cadista Ramón ocupa la meta azulina esta temporada. Se trata de un arquero experimentado que destaca por su seguridad y carácter. Hasta el momento, está viviendo una segunda juventud, siendo uno de los mejores del equipo. La semana pasada fue el héroe en Albacete parando un penalti a Calle.
El doble pivote lo conforman los veteratos Nando y Abel Segovia. Son dos futbolistas de corte diferente. El primero destaca por la destrucción y organización del juego, mientras que el segundo por la llegada desde segunda línea. Otra alternativa es la entrada del ex cadista Lolo Armario, pero su participación está descartada al haber sido expulsado la semana pasada en Albacete.
Rivera tendrá que elegir entre el talento de Coco en el último pase o la llegada desde segunda línea para acompañar al único punta Plata. El centro delantero destaca por adaptarse a varias situaciones de juego: bien por arriba como aseado en el juego de asociación.
Plantilla
Nos encontramos ante un plantel modesto, formado por jugadores de perfil medio para cumplir con el objetivo primodial de no pasar apuros, tal como no consiguiese el año pasado, pero sin renunciar a ocupar puestos nobles, tal y como está sucediendo. Rivera ya ha demostrado, en cada conjunto que ha dirigido, capacidad para sacar fruto de dónde apenas lo hay, objetiendo en 200 % de los jugadores que posee. Por eso, creo que este Écija Balompié es uno de los candidatos a ser el equipo revelación de este curso deportivo.
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| Rivera, técnico del Écija |
Junto a ellos, han retornado al club Pizarraya (Puertollano) y Plata (RSD Alcalá), además de los defensas Astraín (Córdoba B), Blanco (Ceuta) y Juanje (Roquetas); los centrocampistas Rubén Cruz (Melilla), Villa (Écija B) y Javi (Écija B); y los delanteros Juanfri (Atlético Malagueño) y Juan Delgado (Séneca).
Síntesis por línea
Miguel Rivera se distingue por el gusto
por el buen fútbol, de ataque. Sus conjuntos son osados, intentan llevar
la iniciativa del juego, con un juego de posesión combinado con
desplazamientos en largo.
Habitualmente, dispone sobre el terreno de juego el clásico 1-4-2-3-1, con dos laterales que se incorporan frecuentemente a labores ofensivas, un doble mediocentro (uno de carácter defensivo y otro ofensivo), dos alas bien abiertas para dar amplitud, un enganche y un delantero referencia. Los de Ramón Banco deben prestar especial atención en el potecial aéreo ofensivo del equipo astigitano, en el que los centrales Óscar y Astraín ven puerta con relativa frecuencia. Por contra, resultan tan vulnerables en esa faceta del juego en su propia área como fuertes en la ajena.
Rara es la ocasión en la que el míster azulino repite once, al contar con una plantilla de jugadores de un nivel bastante parejo, por lo que no es de extrañar que nos vuelva a sorprender con otra alineación.
Portería
El ex cadista Ramón ocupa la meta azulina esta temporada. Se trata de un arquero experimentado que destaca por su seguridad y carácter. Hasta el momento, está viviendo una segunda juventud, siendo uno de los mejores del equipo. La semana pasada fue el héroe en Albacete parando un penalti a Calle.
Defensa
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| Pizarraya, extremo-lateral del Écija |
Manuel Blanco y el polivalente Antoñito se alternan en el lateral derecho del equipo. Blanco no estuvo por sanción en Albacete, por lo que lo más probable es que vuelva al once, adelantando a Antoñito al extremo derecho. El lateral zurdo habitual es el ex canterano del Cádiz Juanje, pero su participación es duda por lesión. En caso de no recuperarse, el extremo Pizarraya ocuparía, una vez más esa demarcación.
El capitán Óscar y el recién llegado de Córdoba B Astraín forman el eje de la zaga sevillana. Se trata de dos centrales fuertes; el primero muy joven con un futuro prometedor, mientras que el segundo proporciona jerarquía y salida de balón desde atrás.
Centro del campo
El doble pivote lo conforman los veteratos Nando y Abel Segovia. Son dos futbolistas de corte diferente. El primero destaca por la destrucción y organización del juego, mientras que el segundo por la llegada desde segunda línea. Otra alternativa es la entrada del ex cadista Lolo Armario, pero su participación está descartada al haber sido expulsado la semana pasada en Albacete.
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| Plata, pichichi del Écija |
La línea de tres mediaspuntas es la que más alterna Rivera, por la que dar en el clavo puede ser harto complicado. Antoñito o Migue se disputan el extremo derecho. Ambos están de dulce, por lo que una de las opciones que maneja Rivera es que los dos participen de inicio, el primero de lateral y el segundo de interior. Ambos son de parecidas características, con un poder de desequilibrio alto en el uno contra uno y bastante llegada a puerta.
En el extremo izquierdo, ocurre parecido que en la derecha. Rubén Cruz y Pizarraya son dos jugadores de un buen nivel, al igual Juanfri; por lo que cualquiera de los tres puede participar. Lo normal es que Pizarraya ocupe lugar en el lateral, con lo que el ex Melilla o el ex atlético Malagueño ganen enteros para ocupar la plaza de extremo zurdo. Cruz destaca por el golpeo con la zurda y llegada a puerta (además de poder también ocupar puestos de segunda punta); mientras que Juanfri por su velocidad y desparpajo.
Delantera
Rivera tendrá que elegir entre el talento de Coco en el último pase o la llegada desde segunda línea para acompañar al único punta Plata. El centro delantero destaca por adaptarse a varias situaciones de juego: bien por arriba como aseado en el juego de asociación.
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